Por Rebecca Alber
Hice un buen número de errores
en mi primer año de docencia que aún me avergüenzan. Aprendí, sin embargo. Y es
justo decir que, cuando se trata de administrar un aula, la mayoría de lo que
aprendemos como nuevos maestros es prueba por fuego. También es inteligente
prestar atención al consejo de aquellos que han caminado, y tropezado, ante
ustedes. Si está luchando con la disciplina, aquí hay cinco consejos que puede
comenzar a usar de inmediato:
# 1 Use una voz
normal y natural
¿Estás enseñando en tu voz
normal? Todos los maestros pueden recordar esto desde el primer año en el aula:
pasar esos primeros meses hablando en un rango superior al normal hasta que un
día, pierdes la voz.
Elevar nuestra voz para llamar
la atención de los estudiantes no es el mejor enfoque, y el estrés que causa y
la vibra que pone en la sala simplemente no lo vale. Los estudiantes reflejarán
tu nivel de voz, así que evita usar esa voz de semi-grito. Si queremos que los
niños hablen a un volumen normal y agradable, debemos hacer lo mismo.
También quieres diferenciar tu
tono. Si está pidiendo a los estudiantes que guarden sus cuadernos y se unan a
sus grupos, asegúrese de usar un tono declarativo y práctico. Si está haciendo
una pregunta sobre un personaje en una historia corta, o sobre las contribuciones
hechas por el Imperio Romano, use un tono invitador y coloquial.
# 2 Habla solo
cuando los estudiantes están callados y listos
Esta pepita de oro me la dio
un veterano de 20 años en mi primer año. Ella me dijo que debería esperar y
esperar un poco más hasta que todos los estudiantes estuvieran callados.
Así que lo intenté; Luché
contra la tentación de hablar. A veces esperaba mucho más de lo que pensaba que
podría aguantar. Poco a poco, los estudiantes se advirtieron mutuamente:
"sshh, ella está tratando de decirnos algo", "vamos, dejen de
hablar" y "hola chicos, callen". (¡Hicieron todo el trabajo por
mí!)
Mi paciencia valió la pena. La
tuya también. Y podrás mantener tu voz.
# 3 Usa señales de
mano y otras comunicaciones no verbales
Sostener una mano en el aire,
y hacer contacto visual con los estudiantes es una gran manera de callar la
clase y llamar su atención sobre usted. Se necesita un tiempo para que los
estudiantes se acostumbren a esto como una rutina, pero funciona de maravilla.
Haga que levanten la mano con usted hasta que todos estén levantados. Luego
baja el tuyo y habla.
Apagar y encender las luces
una vez para llamar la atención es un viejo pero bueno. También podría ser algo
que haga de manera rutinaria para hacerles saber que tienen tres minutos para
terminar una tarea o limpiar, etc.
Con los estudiantes más
jóvenes, intente aplaudir tres veces y enseñe a los niños a responder
rápidamente dos veces. Esta es una manera divertida y activa de captar su
atención y todos los ojos puestos en ti.
# 4 Abordar
problemas de comportamiento de forma rápida y sabia
Asegúrese de resolver un
problema entre usted y un estudiante o entre dos estudiantes lo más rápido
posible. Los malos sentimientos, de su parte o los estudiantes, pueden crecer
tan rápidamente de las montañas de las montañas.
Ahora, para manejar esos
conflictos sabiamente, usted y el estudiante deben alejarse de los otros
estudiantes, tal vez en la entrada de la clase. Espere hasta después de la
instrucción si es posible, evitando la interrupción de la lección. Haga
preguntas ingenuas como, "¿Cómo podría ayudarlo?" No acuses al niño
de nada. Actúa como si te importara, incluso si tienes la sensación opuesta en
ese momento. El estudiante generalmente se desarmará porque podría estar
esperando que estés enojado y confrontaciones.
Y, si debe abordar el mal
comportamiento durante su instrucción, siempre tome un enfoque positivo. Diga:
"Parece que tiene una pregunta" en lugar de "¿Por qué está fuera
de la tarea y hablando?"
Cuando los estudiantes tienen
conflictos entre ellos, haga arreglos para que los estudiantes se reúnan con
usted durante el almuerzo, después o antes de la escuela. Use un lenguaje
neutral mientras actúa como mediador, ayudándoles a resolver el problema de forma
pacífica, o al menos a una tregua agradable.
# 5 Siempre tenga
una lección atractiva y bien diseñada
Este
consejo es el más importante de todos. Tal vez haya escuchado el dicho, si no
tiene un plan para ellos, tendrán uno para usted. Es mejor quedarse sin tiempo
que quedarse corto en una lección.
De mi propia experiencia de
primera mano y después de muchas observaciones de aulas, algo de lo que estoy
seguro: ¡los estudiantes aburridos tienen problemas! Si la lección está mal
planificada, a menudo hay demasiadas cosas que hablar y contar por parte del
profesor y que los alumnos no aprenden y descubren lo suficiente. Todos sabemos
que las lecciones interesantes requieren tanto tiempo mental y tiempo para
planear. Y ciertamente lo valen, por muchas razones.
Comparta con nosotros sus
experiencias de gestión del aula: ¿qué desafíos específicos tiene? ¿Qué
estrategias han funcionado bien para ti y tus alumnos? Por favor, comparta en
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