Con los nuevos paradigmas
educativos, la figura y el rol del docente cambia. Ya no se trata de la persona
que centraliza todo el conocimiento, sino que adquiere un rol de guía y
acompañante en el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes. Al mismo
tiempo, comienzan a valorarse las múltiples ventajas de trabajar en equipo
frente a la antigua idea que concebía la docencia como una actividad
profesional individual.
Y tú, ¿todavía no aprovechas
todas las ventajas de trabajar en equipo? Con los consejos que te proponemos,
¡ya no tendrás excusa!
Es necesario encontrar formas
de organización que posibiliten una interdisciplinariedad para obtener un
equilibrio entre la cantidad de los contenidos que marca el currículum y el
tiempo del que se dispone para la docencia. ¿Y si los equipos docentes pudiesen
ser una perfecta herramienta para conseguirlo? Te enumeramos sus ventajas:
Ventajas para el alumnado
La coordinación de los
docentes permite una coherencia en los métodos que se llevan a cabo y en los
criterios de evaluación. De esta forma se evita el solapamiento de
conocimientos, el exceso de deberes y permite que las asignaturas se trabajen
de manera interdisciplinar.
La evaluación de la práctica
docente es más continuada y permanente, lo que facilita la actualización de las
metodologías.
El trabajo en equipo de los
docentes es siempre un buen ejemplo para el alumnado. ¡Es casi imposible
enseñar a colaborar, si no se comienza desde la misma práctica!
Asimismo, trabajando
colaborativamente se pueden identificar y analizar aquellos conflictos que
surgen entre los adultos y que posteriormente pueden utilizarse para adoptar
estrategias y guiar a los alumnos que se encuentren en la misma situación.
Ventajas para las familias
Una preocupación habitual de
las familias es el cambio de metodologías y profesores al cambiar de ciclo o de
curso, algo que disminuiría notablemente si todo el profesorado se implica en
el mismo proyecto de centro y parte de unos objetivos comunes.
Ventajas para los docentes
Colaborar proporciona
oportunidades de aprendizaje, gracias a la reflexión conjunta del equipo
docente.
Se reduce el exceso de
trabajo, ya que se comparten las cargas y las presiones que conlleva la docencia.
Compartir conflictos,
frustraciones y fracasos puede ayudar a reducir el estrés docente, al sentir
que los compañeros viven situaciones similares y que podemos pedir consejo y
opinión a aquellos que han pasado por lo mismo y de esta forma poder analizar
una situación desde diferentes enfoques.
Gracias a la sinergia de los
miembros del grupo se propicia una mejora de la actuación docente, una mayor
calidad educativa.
Se potencia el desarrollo
personal de cada uno de los docentes, ya que al trabajar en equipo se obtiene
seguridad y afecto, además de un constante contacto y diálogo.
Pero ¿por dónde empezamos?
Las ventajas de la creación de
una red educativa son indiscutibles, pero cuando se trata de llevarlo a cabo es
un trabajo complicado. ¡Pero la mejor
manera de aprender es poniéndolo en práctica! Partiendo de problemas
reales, poco a poco se pueden ir construyendo equipos que ayudarán a mejorar la
acción educativa.
Por todo ello es importante un
cambio en las prácticas y los recursos y tener en cuenta una serie de factores:
Buena
comunicación. Para ello es esencial crear un plan de
comunicación donde se especifiquen temas como la delimitación de las
responsabilidades, los protocolos de actuación, el establecimiento de canales
de comunicación, etc.
Objetivo
común, compartido y
consensuado con todos los miembros del equipo. A partir de aquí, todos
deben poner su granito de arena para lograr el objetivo propuesto, siendo
necesario que cada uno de los miembros del equipo desarrolle alguna acción
imprescindible para llegar a la meta final.
Actitud
personal positiva. Las actitudes adoptadas por cada uno de los
miembros del equipo formarán el clima de trabajo. Por eso es importante que
haya una actitud positiva de colaboración, adaptación al cambio, de ayuda, la
implicación en el proyecto, etc.
Participación
activa. En un equipo es imprescindible que haya una participación
de todos los miembros para poder crear proyectos de calidad. Debe crearse un
clima de confianza, respeto, escucha activa y tolerancia hacia el grupo para
facilitar la expresión de todos y cada uno de las personas que componen el
equipo.
Toma
de decisiones, un elemento clave en la formación en equipo.
Es necesario que el proceso de toma de decisiones sea consensuado por todos los
miembros, que todos se sientan cómodos con él. ¡Es básico ser capaces de
decidir eficazmente para poder seguir avanzando cada día!
¿Te animas a crear una red
educativa y a trabajar en equipo para mejorar la educación?
No
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Excelente análisis sobre la diferencia del trabajo docente en equipo, y las ventajas que se obtiene en el proceso de É/A
ResponderEliminarGracias Angela. El trabajo en equipo en los centros educativos es una estrategia que debemos desarrollar por los beneficios que proporciona.
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